Atentos, porque la receta de hoy es apta para vegetarianos y libre de gluten. Aún así, no le falta un ápice de sabor y os va a encantar a todos. ¡Prepara unos ñoquis de castaña con Amarelante!
Hoy os traemos una receta de un plato italiano, quizás no tan conocido como los espaguetis, los macarrones o la lasaña, pero igualmente sabroso y versátil: los ñoquis. Tradicionalmente, los ñoquis “básicos” se hacen a base de patata y con harina de trigo, pero admiten un sinfín de variaciones: con calabaza, con espinacas, con queso… Por supuesto, los vamos a preparar con castañas.
No es una receta difícil, pero sí que requiere tiempo y mancharse las manos.
Ingredientes:
- 700 g de patatas de la huerta
- 200 g de castañas secas Amarelante
- 1 huevo de gallinas libres y felices
- 130 g de harina de castaña Amarelante
- 50 g de harina de trigo
- Sal
- Pimienta
- Aceite de oliva
Preparación:
En una olla ponemos las patatas enteras y sin pelar. Las tapamos con agua, añadimos sal y dejamos hervir hasta que estén bien blanditas y fáciles de aplastar.
Por otro lado, ponemos a cocer las castañas con un poco de sal también hasta que estén muy blandas.
Cuando las patatas están listas, las pelamos y las aplastamos. También aplastaremos las castañas cuando estén bien cocidas.
En un cuenco, mezclamos bien las patatas y las castañas aplastadas, añadiendo algo más de sal (si lo consideramos necesario) y pimienta al gusto. Añadimos el huevo y mezclamos muy bien y rápidamente, para evitar que la temperatura de la masa lo cueza. Vamos añadiendo la harina y amasando hasta que tenga una cierta consistencia. En este punto, podemos detectar que algunos trozos no han quedado bien deshechos y aprovechamos para aplastarlos bien con las manos.
Vamos cortando pedazos de esta masa y la amasamos formando cilindros de alrededor de 3 cm de diámetro. Cortamos cada uno de estos cilindros en trozos de 2-3 cm.
Los echamos en agua hirviendo, añadimos un chorro de aceite de oliva y los sacamos en cuanto floten. Es importante estar atentos a esto último porque si los dejamos cocer de más, se desharán. Los sacamos con una espumadera y los dejamos un ratito en un colador para que escurran bien.
Añadimos nuestra salsa favorita. Igual que con la pasta, los ñoquis admiten una gran variedad de salsas. En este caso, para no enmascarar el sabor de la castaña, nos limitamos a echarles una sencilla salsa de verduras.
¡A disfrutar!